¿Siente usted que su vida es igual hoy como lo fue el mes pasado y el mes anterior y el anterior al anterior?  ¿Parece que no importa cuán duro usted trabaja con algo, parece que no está cambiando?  ¿Siente como si las bendiciones de Dios de alguna manera han parado?  ¿Qué es eso?  Usted está encerrado en una rutina, para  decirlo así.  Algo necesita cambiar.

Algunas veces, descubrimos que nuestras bendiciones han sido bloqueadas.  Mi búsqueda es para descubrir de qué se trata.  ¿Qué está bloqueando nuestras bendiciones?  Si podemos descubrir escrituralmente qué está bloqueando nuestras bendiciones, por qué nos hemos quedado atrapados en una rutina, lo podemos corregir.  Podemos hacer los ajustes necesarios, y las bendiciones pueden fluir.  Yo no quiero que mis bendiciones estén bloqueadas ya más.  ¿Y usted?

La obediencia trae la bendición a su vida.  Deuteronomio 28:15: “Pero acontecerá, si no oyeres la voz de Jehová tu Dios, para procurar cumplir todos sus mandamientos y sus estatutos que yo te intimo hoy, que vendrán sobre ti todas estas maldiciones...”  La obediencia abre la puerta a las bendiciones.  La desobediencia bloquea las bendiciones y abre la puerta a una maldición.  Yo quiero compartir con usted cuatro áreas posibles donde usted podría haber sido desobediente, o cuatro caminos para salir de esta rutina aburrida.

1. Ponga la Palabra de Dios Primero

Pregúntese: “¿Estoy poniendo a Dios en primer lugar en mi vida o he dejado que las cosas se vuelvan más importantes para mí?”  Jesús dijo en Mateo 6:33: “Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.”

Dios no está en contra de que nosotros tengamos cosas; Él está en contra de que las cosas nos tengan a nosotros.  Dios quiere bendecirlo más allá de sus imaginaciones más audaces.  Pero, ¿es su búsqueda principal conocerlo a Él, ser más como Él?  Si Dios juega un rol secundario en su vida, entonces una puerta ha sido abierta para que Satanás entre y bloquee las bendiciones de Dios.  Si usted está poniendo a Dios primero, entonces la puerta ha sido cerrada.  Satanás no tiene derecho a bloquear sus bendiciones.

2.  Viva un Estilo de Vida Santo

¿Está usted viviendo un estilo de vida santo o ha aceptado los standards del mundo para la conducta moral?  La Biblia dice: “… sed santos, porque yo soy santo” (Lev. 11:45).  ¿Cómo es su estilo de vida?  ¿Es agradable a Dios?  ¿Está el Espíritu Santo cómodo en su hogar, en su auto, entre sus amigos?

Nuestra falta de consideración por los standards de Dios para el comportamiento moral tiene mucho que ver con que nuestras bendiciones estén siendo bloqueadas.  No puede comprometer los standards de Dios y esperar que las bendiciones fluyan.  Debemos examinar los shows que miramos, las palabras de nuestra boca, las influencias alrededor nuestro si queremos salir de la aburrida rutina en la que estamos.  Dios bendecirá a aquellos que respetan Sus principios para la vida moral.

¿Está usted caminando en amor o hay contienda y falta de perdón en su corazón?  Jesús dijo en Juan 13:34: “Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros.”

Las bendiciones son bloqueadas cuando rechazamos caminar en amor.  No importa cuán difícil parezca, no importa cuántas capas de carne necesite usted quitar de su vida: perdone.  Permanezca fuera de la contienda.  Libérese de la amargura.  Es un bloqueador de la bendición.  Mantendrá su vida en una profunda rutina si usted no extrae la amargura por fe y diariamente elije perdonar.  Nunca es demasiado tarde para comenzar el proceso de caminar en amor.

4.  Honre a Dios con Sus Diezmos

¿Está usted honrando a Dios con sus diezmos y ofrendas, o le está robando?  Malaquías 3:8,9 dice: ¿Robará el hombre a Dios? Pues vosotros me habéis robado. Y dijisteis: ¿En qué te hemos robado? En vuestros diezmos y ofrendas. Malditos sois con maldición …
En otras palabras, debido a que usted no honra a Dios con sus diezmos y ofrendas, sus bendiciones han sido bloqueadas.

¿Está usted en una rutina financiera?  Si es así, miremos sus hábitos de dar.  ¿Está usted dando a Dios lo que le pertenece?  La correcta actitud para diezmar es separarlo primero.  No pague a todos y luego si queda algo, se lo da a Dios.  Su dinero irá mucho más lejos con el noventa por ciento y dándole a Dios Su diez por ciento que guardar el 100 por ciento para usted mismo.  Créame.

Si usted ha descubierto que su vida está en una aburrida rutina, es tiempo de hacer los cambios para salir.  Tenemos que tomar un inventario de nuestras vidas. ¿Está Dios todavía primer lugar en su vida?  ¿Está usted buscando a Dios con todo su corazón, con toda su fuerza, con todo su ser o se han vuelto las cosas y la gente  más importantes para usted?

¿Está usted caminando en amor o está albergando contienda y falta de perdón y amargura?  ¿Está viviendo un estilo de vida agradable a Dios?  ¿Está honrando a Dios con sus diezmos y ofrendas?  Tome la lista de estas cuatro cosas diferentes y sea honesto con usted mismo.  Podría ser donde se halla la desobediencia.
Podría ser la causa de la rutina en la cual usted se encuentra.

Haga cualquier corrección que necesite hacer.  Pídale a Dios que lo perdone.  Diga lo que dijo David en el Salmo 67:1: “Dios tenga misericordia de nosotros, y nos bendiga…” Podemos pedirle a Dios perdón en estas áreas de desobediencia y Él nos perdonará.  Las barreras serán removidas.  La causa para la maldición será quitada y las bendiciones fluirán.  Pero tenemos que estar firmes.  Lo podemos hacer.